martes, enero 27, 2015

A quien espere leer aquí un poema que pase de largo.

Hace más de veinte años que tengo recuerdos. Y da vértigo.
Dónde van a quedar todos estos momentos? Quedo famélico.
Hace frío ahí fuera para ir a darme un paseo... Y estoy colérico.

Siento miedo de quedar atrás aunque hay veces que sólo quiero eso.
Dónde están todas esas personas con quien me podía comunicar?
Teníamos planes, deseos, sueños...
Y hoy, triste como siempre, miro a mi espalda y todo quedó ahí. Apartado de mi sendero.

Nos rodea la comunicación y la información. Pero yo me siento atrapado, de nuevo, en esta celda de cristal que impide que oigáis mis chillidos desesperados.

Dónde ha quedado todo ese amor que profesábamos?
Está también entreteniéndose con un vidrio retroiluminado?
Yo tengo pesadillas despierto.
Me veo solo rodeado de antiguos cerebros.

Hay un trozo perdido de alma de cada uno de nosotros que está siendo sumido por el desagüe de la insatisfacción.

Y si lo único que quieres es poder susurrar a un oído 'te quiero'?
O abrazar a media noche a un cómplice de almohada?
Y si, al final, la gran mentira de amar era lo que nos hacía fuertes?
O la capacidad de vernos reflejados en la pupila del de enfrente?


Nos sentimos solos todos.
Aunque sea sólo un poco.
Y yo quiero estar rodeado de amor.
Y poder contar historias alrededor de un fuego, sin tan siquiera un reloj.
Y yacer en algún sitio. Con un acompañante...

Que sea humano.

Que me de calor.

No hay comentarios: