martes, octubre 18, 2011

Flores de Acanto



Como arena derramada
sobre el agua das brazadas
sin saber el rumbo al que nadar.

Cada gota luminosa
que desprendes de tu boca
mata a este ciclo de espiral.

Los silencios de apatía
braman desde la guarida
donde entierras todo tu arsenal.

Y las yagas se levantan.
Tus dibujos de garganta
sólo buscan ir a derribar.

Punto guía que servías para darme fuerzas.
Viejas bestias que festejan mi nueva caída.
Láudano para colmar de sangre mis heridas.
La tormenta ya no cesa.
Mis demonios se revelan.
No hay cristal que te detenga,
¡Salta y busca esa respuesta!

El funeral no debe continuar.
Flores de acanto yacen mustias ya.
Un arpa llora sobre nuestro altar.
Somos ceniza...
Llueve oscuridad.