Entre esas hojas secas...
duermen mis poemas arrugados.
Hace poco me di cuenta
de que elegí el lado equivocado.
Realidades en dos dimensiones.
Tránsito, tráfico y transición...
Entre toda esa gente...
echan la siesta mis canciones.
Hace sólo unos días
di mi salto a las rotundas conclusiones.
Y en el fondo encontré mi suerte.
Arrugada, mustia y muerta
como el agua de la fuente
de donde brotaban siluetas.
1 comentario:
Me gusta cómo escribes!
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